Reflexión sobre el trabajo en grupo

Experiencias realizando actividades grupales

Después de revisar los contenidos del segundo tema del curso (sobre el trabajo colaborativo), pasamos a las actividades del tema:

• En una primera tarea participé en un taller sobre la elaboración de una ayuda.
  En una primera fase, un supuesto alumno tiene problemas para acceder al libro de calificaciones, así como a la calificación y comentarios del tutor en las tareas, y necesita que creemos una ayuda. Partiendo de la experiencia de la unidad anterior creando un vídeo de presentación, volví a utilizar Openshot con las instrucciones para acceder a las calificaciones y comentarios de retroalimentación del tutor.
  Aquí os dejo el resultado final, una vez subido a la Mediateca de EducaMadrid:




Tras esta primera fase, de entrega, participé en una segunda fase, de evaluación. En esta no solo tuve que autoevaluar mi trabajo, sino que además tuve que evaluar los trabajos de otros tres compañeros, utilizando la siguiente rúbrica:





Rúbrica para la evaluación del taller.


Por una parte, las rúbricas son herramientas de evaluación muy útiles: desde el principio tuve claro qué debía hacer y en qué condiciones.
Por otro lado, el taller como herramienta de evaluación entre pares me permitió obtener otros puntos de vista de mis compañeros y, además, el hecho de tener que analizar su trabajo para evaluarlo hizo que reflexionara acerca de mi propio trabajo.





En suma, esta ha sido una experiencia muy positiva y gratificante, y es una de las cosas que tengo pendientes en mi docencia con mis alumnos.

• En una segunda tarea participé en un trabajo en grupo, analizando casos de trabajo grupal.
Mi grupo (subgrupo B1) ha sido variopinto: aparte de mí mismo, profesor de Matemáticas, estábamos un profesor de Inglés, un profesor de Administración de Empresas, una profesora de Lengua Castellana y Literatura, una profesora de Informática y un profesor de Lenguas Clásicas. ¡Todos de especialidades diferentes!
Los casos a tratar constituían claros ejemplos de los problemas que podemos encontrarnos en un curso de las características de los del CRIF:
• Un grupo de trabajo tiene un componente con contribuciones menos significativas que los demás.
• Un grupo de trabajo no es capaz de consensuar una contribución colectiva.
• Un grupo de trabajo tiene un trol enturbiando el foro de trabajo.
Todo el trabajo se centralizó en los diferentes hilos de un foro específico. Todos propusimos ideas, las comparamos, las debatimos y alcanzamos acuerdos sin dificultad.




Estoy seguro de que lo que nos unía (en esencia, el ser docentes) nos permitió tener una visión lo bastante próxima como para alcanzar un consenso, mientras que lo que nos separaba (las distintas especialidades y el background que ello conlleva) aportó riqueza a nuestros puntos de vista y aportaciones.
De mis compañeros me llevo, así como una experiencia gratificante y muy positiva, muchas ideas y materiales web acerca del trabajo en equipo y la toma de decisiones en grupo:

• Vídeo – Ventajas de un buen trabajo en equipo – Publicado por “Jeles educadoras”.
• Vídeo – Motivación personal y profesional, y sentido de pertenencia – Publicado por “ProteccionSA”
• Presentación – Técnicas de toma de decisiones – Raúl Alguacil Titos en Consejería de Educación, Juventud y Deportes de la Región de Murcia.
• Documento – Decisión por consenso – Wikipedia.es
• Documento – 7 métodos para tomar decisiones en grupo – Aprender colaborando
• Vídeo – La queja – Ignacio Astro

Todas estas actividades me han sido de gran interés y me han aportado una visión complementaria de las actividades grupales.

Problemas en las actividades grupales

En mi experiencia como alumno en este curso no ha habido problemas en el desarrollo de las actividades grupales. En la segunda tarea se analizaron los casos más relevantes en los que podría aparecer conflicto en un grupo:

• Falta de aporte significativo de uno de los miembros.
• Falta de acuerdo en el grupo.
• Comportamiento disruptivo de uno de los miembros.

En los dos primeros casos, el sentido común y la buena voluntad de unos y otros es la clave para mejorar la dinámica grupal: siempre hay lugar para las contribuciones de todos, un grupo motivado para alcanzar un acuerdo será capaz de dialogar para eliminar las diferencias y alcanzar un consenso.

En el tercer caso, tras una llamada al orden, no cabe el diálogo: aquellos miembros que busquen activamente el caos y entorpezcan el trabajo del grupo deben ser eliminados del mismo.

Futuros desafíos

Todo lo anteriormente mencionado abre muchos interrogantes para el futuro, nuevamente, estoy acostumbrado a trabajar con mis alumnos adolescentes, a los que puedo ayudar y guiar en el día a día del aula, pero:

• ¿Cómo ayudar "en remoto" a los alumnos a través exclusivamente del Aula virtual? ¿Cómo guiar "en remoto" a un grupo heterogéneo cuando no alcanzan un acuerdo?
  Siempre se pueden intentar enfoques alternativos: un vídeo, una presentación, un artículo... que aporten diferentes visiones para ayudar a los alumnos.. pero en este caso, no tenemos la oportunidad de sentarnos con los alumnos y ver con cuidado qué les ocurre y cómo enfocar la cuestión con la ayuda del contacto humano presencial.

Nuevamente, esas diferencias impulsan una reflexión muy interesante y un inquietante cambio de paradigma. Iremos viendo...



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